miércoles, 20 de septiembre de 2023

 

Tengo cada vez más claro que al hablar de alimentación sana hay que considerar el asunto a nivel individual, en cuanto a dieta apropiada para cada persona, sobre todo a medida que cumplimos años o sea por la edad, y también debido al echo de que nuestros gustos personales van mutando, ademas de que están cada vez más influenciados por la evolución culinaria que, inevitablemente, sobre todo a lo largo de las últimas décadas, está siendo caracterizada por la cocina de culturas de otros continentes, con todo una serie de ingredientes exóticos que vamos incluyendo a nuestras despensas, y consumiendo.


Igual que con las nuevas tecnologías parece que ya no hay vuelta atrás; pero lo importante es quedarnos con nuestra esencia, aquella autentica de cada uno, potenciar nuestro discernimiento, nuestra conciencia. Una vez logrado eso, finalmente podremos ser co-creadores del Mundo que queremos manifestar y vivir.


La Vida a menudo nos concede el don de experimentar lo que es extraordinario, y aquí estamos para disfrutar de esos dones también; lo importante creo que es no confundir lo que es extra-ordinario con lo ordinario y así pretender vivir cada día lo que es extraordinario como algo normal y corriente; hablo del equilibrio que procede del conformarse con vivir equilibrada-mente, por regla general. 

 

Hablando de nutrición natural, lo saludable, lo que es fuente de energía y longevidad, suele ser una alimentación básicamente vegetariana bien cuidada pero no demasiado elaborada, con alimentos de temporada y de proximidad, ademas de en su estado natural, cultivados sin agroquímicos etc.


No voy a repetir lo que ya está escrito en este blog, referente a la alimentación cada vez más industrializada, a la pérdida de nuestra soberanía alimentaria, en cada país, a que tenemos a nuestro alcance cada vez más alimentos procedentes de otros países o continentes, a que en definitiva lo más importante a tener en cuenta es nuestro impacto ambiental, el no fomentar una economía alimentaria globalizada y destructiva como la actual, lamentablemente.


Hay mucha polémica sobre las propiedades benéficas y curativas de alimentos, plantas, especias y remedios naturales procedentes de otros continentes. Indudablemente hay todos unos intereses de mercado detrás, aunque es ineludible reconocer que algunos ingredientes naturales tienen propiedades excelentes que pueden resolver ciertas patologías, mejorar nuestro estado de salud, por lo tanto en este caso podríamos decir: “el fin justifica los medios…”.


No obstante, las propiedades de la mayoría de remedios naturales exóticos se pueden encontrar en plantas, raíces, flores y frutos kilómetro cero, es decir presentes en nuestros climas, y a través de remedios naturales que son parte de nuestra sabiduría ancestral; se puede decir lo mismo en cuanto a los alimentos. 

 

Además muchos de estos remedios/alimentos pueden ser cultivados también más cerca de donde proceden, de donde son originarios, o hasta localmente; así podemos evitar de depender siempre y unicamente de esos gigantes económicos que se van apoderando del planeta entero, desde los recursos naturales hasta los seres vivos.



miércoles, 15 de junio de 2022

MASTICACIÓN - DIGESTIÓN


Estas dos funciones que nuestro organismo cumple prácticamente a diario debido a que, por lo general, nuestra vida en este plan depende también de los alimentos, como bien sabemos; dichas funciones se desarrollan en base a un primer principio voluntario que es la masticación, o sea dictado por nuestra acción-elección (supuestamente consciente) de comer, y otro involuntario, la digestión, gestionado y que se activa gracias a la Inteligencia de nuestro organismo. La digestión es una compleja, maravillosa función que nuestro organismo sabe realizar independiente de nuestra voluntad, cada vez que comemos algo. Pero depende de la primera… si no comemos (acción que implica masticar aquello que llevamos hasta nuestra boca) la digestión no puede activarse, claramente.

Por lo tanto se puede observar como tras movilizar nuestra voluntad-necesidad, en este caso la acción de comer un alimento, tal cual como podría ser una naranja o algo más elaborado, como podría ser un cocido de alubias con cebolla y perejil, tras llevar un alimento hasta la boca, con la MASTICACIÓN activamos esta segunda función involuntaria que nos brinda disfrute, vida y salud: la DIGESTIÓN.

En nuestra boca gustamos, saboreamos, nuestro organismo identifica, pre-digiere cada bocado que comemos ensalivando lo, mientras lo vamos simplificando, reduciendo y desmenuzando a través de la masticación. A medida y dependiendo de cómo masticamos depende este proceso vital involuntario de la DIGESTIÓN, es un sistema vital de nuestro organismo, nuestra alimentación depende de dicho proceso: consiste en reducir, procesar, asimilar todo lo que necesita, a partir de lo que recibe a través de la boca, y expulsar lo que no necesita y que es indigerible. Tras digerir, nuestras células realizan el metabolismo de lo que hemos ingerido.

En función de la consistencia de los alimentos que comemos depende nuestra masticación. Todos sabemos que una buena masticación es básica para que nuestro organismo digiera y asimile nutrientes a partir de nuestra alimentación, de lo que comemos. Cada bocado tiene que ser masticado hasta que nuestros dientes lo hayan desintegrado completamente, hasta que esté completamente ensalivado, pues si nos tomamos este cuidado en cada comida nos aseguramos y adjudicamos muchas ventajas, entre ellas:

- Digestión del alimento más ligera, rápida y fácil.

- Asimilación completa de los nutrientes.

- Facilitamos el transito intestinal del bolo alimenticio, que a lo larga de su trayecto va cediendo a la flora intestinal sus propiedades, gracias a tialina, jugos gástricos, jugos pancreáticos y biliares, con todas sus componentes.

- Favorecemos la eliminación de los restos del bolo alimenticio como fibras, celulosa y cenizas, que transitan de esta manera con más rapidez todo el trayecto intestinal, hasta su natural expulsión.

- Con una masticación consciente, prolongada durante el tiempo suficiente, hasta sentir en la boca que el bocado tiene una consistencia entre sólido y liquida homogénea, favorecemos la absorción de todos los nutrientes de los alimentos que comemos; incluso comeremos menos cantidades de alimentos, por extraer de ellos todos sus nutrientes, las sustancias que necesitamos y su metabolismo.

Cuanto más consigamos triturar los alimentos con nuestra dentadura, más sencillo y fácil serán para nuestra flora bacteriana las tareas de descomponer, reducir, asimilar, absorber, etc. todos los nutrientes de lo que comemos.

Son especialmente las personas con digestiones lentas y pesadas aquellas que deberían prestar más atención en masticar muy bien. El fuego gástrico, nuestro procesador digestivo, muy a menudo ha perdido vigor debido a diferentes factores básicos que pueden resumirse en:

- Una alimentación inadecuada, es decir comer en exceso (puede ser también en defecto, aunque en nuestra época y en occidente eso es poco frecuente).

- Masticación insuficiente, con la consecuente ingesta de un bolo alimenticio poco ensalivado y no bien desintegrado, no suficientemente triturado por la dentadura.

- Combinar variedades de alimentos diferentes en una misma comida (es recomendable no mezclar más de dos platos en cada comida para tener buenas digestiones).

- Combinar categorías de alimentos incompatibles entre ellas en una misma comida.

- Desconocer la compatibilidad entre alimentos con respecto a una correcta digestión y asimilación de los nutrientes.

- Comer según nuestros antojos y no cuando hay necesidad, o sea cuando aparece el estimulo del apetito, que es una necesidad natural del organismo animal.

- Beber líquidos justo antes de las comidas; nunca deberíamos beber líquidos almeno una hora antes de comer.


domingo, 3 de enero de 2021

 



VEGANISMO  

                No recuerdo exactamente desde cuando se ha inventado la palabra “Vegano”, veganismo. Creo que hace más de una década... y menos de dos. Antes se hablaba de vegetarianismo, y por lo general decir “soy vegetariano” quería decir que, además de comer vegetales, comías también derivados animales como leche y lácteos como el queso, huevos y miel. De hecho a los vegetarianos puristas se les llamaba “Vegetalianos”; pues estaban los vegetarianos que comen también derivados animales pero nada de carne y pescado, y estaban los más ortodoxos, o como queramos llamarlos, que solamente comen productos de origen vegetal y que ahora se definen como veganos. Personalmente como palabra me gusta más “vegano” que “vegetaliano”, me suena mejor... la palabra “vegetaliano” ha sido recortada o abreviada.
 

                Pues me complace escribir algunas líneas al respecto; como bien sabemos la naturaleza primitiva del Ser Humano es depredadora al igual que la de los otros animales…. En el reino animal hay instinto pero no hay consciencia, en el Ser Humano a diferencia de otros animales hay también Consciencia, y desde mi punto de vista esto es lo que nos diferencia, sustancialmente, del resto de la fauna terrestre. Sobre este punto se podría filosofar, argumentar y analizar infinitud de matices, pero no es esta mi finalidad en el contexto del blog.
 

                 Me limito a analizar algunos aspectos, los que me llaman más la atención, y a compartir mi visión al respecto; dentro del reino animal hay animales que por su naturaleza son carnívoros, animales omnivoros y animales vegetarianos. En el post que puedes leer a continuación de éste, argumento algo también al respecto de esta cuestión: “¿debería ser el Ser humano carnívoro, omnívoro, vegetariano (ovo-lácteo) o bien vegano?”, para que cada persona opine y traiga sus propias conclusiones;
 

                 Pero lo que quiero destacar o compartir es una reflexión que personalmente me ayuda a entender nuestra Naturaleza, o enfocar mejor la finalidad de la evolución humana dentro del contexto de la alimentación, del arte culinario aplicado al concepto cultural, de nuestros orígenes antropológicos, de nuestras tradiciones, de nuestra salud que como bien sabemos, o deberíamos de saber, depende en gran parte de la cocina que elaboramos a diario y de cómo comemos, de qué productos ingerimos, de su calidad, de su procedencia, de nuestra relación con la Tierra Madre y sus reinos de los que somos parte.
 

                  En este sentido, tanto los macrobióticos como los veganos, prescinden totalmente (por su filosofía de vida) de todo tipo de derivados de origen animal; nada de lácteos, nada de huevos, nada de miel…. No obstante los primeros (la macrobiótica es una cultura y filosofía de vida muy antigua originaria de Japón con fundamentos interesantes que merecen ser considerados) incluyen en su dieta algo de carne y/o de pescado blanco, por lo general una comida semanal. El punto sobre lo que coinciden ambas, macrobiótica y veganismo, es que no tenemos el derecho de explotar a los animales, el reino animal en general, para nuestra subsistencia en términos de alimentación. Personalmente considero respetable dicho principio, así como considero respetable la visión Indú, básicamente vegetariana en su origen, que incluye derivados lácteos y leche en su dieta. El punto que quiero destacar es la importancia de “no explotar” el reino animal (seres humanos incluydos), ni el reino vegetal, ni nuestra Madre….. la Tierra.

               Se habla cada vez más a menudo de “Cocina Natural”, de cocina sana. Eso está muy bien…. Parece cada vez mas que se está poniendo como de moda. Ojalá esto siga creciendo y creciendo, no como una “moda”, como algo que implica competir… sino más bien como parte de la evolución Humana, de la evolución Planetaria. También en este campo, que es de primaria importancia, ya que de la alimentación humana depende una buena parte de la explotación de recursos y de la propia Naturaleza, parece que haya un despertar de “consciencia”. Ahora más que nunca antes, en nuestra historia, nos dirigimos hacia un nuevo comienzo, absolutamente necesario para que pueda haber un futuro para Planeta y Humanidad.

               El termino de alimentación sana es como todo en la vida, algo relativo a la interpretación de cada persona. De echo puede ser un concepto muy extenso, dependiendo de como se mire; además de influenciar claramente sobre el estado de salud de las personas, tiene repercusiones directas e indirectas sobre todos los demás reinos de la Vida planetaria.

               Para algunas personas “comer un plato de ensalada” quiere decir estar cuidando de su propia salud, aunque luego sean capaces de preparar una barbacoa y comer carne de cerdo en cantidad… pero bueno, por lo menos acompañada de una ensalada…. Algo es algo.

                Para otras personas una alimentación sana implica cumplir con toda una serie de requisitos, de filosofía, categorías y calidad de alimentos, reglas y criterios, para así decirlo, hasta el punto de poder marear a otras no tan “eruditas”en materia.

                 La finalidad de este blog es compartir una visión completa en este ámbito, orientada al bienestar personal y colectivo… esto no quiere decir que toda persona tenga que volverse 100% vegetariana, pero sí que tenga en cuenta ciertos criterios ineludibles en este campo. Por ejemplo lo que decía George Osawa, uno de los pioneros de la cocina Macrobiótica en occidente:"El ser humano está dotado por la Naturaleza de 32 dientes; excepto los 4 colmillos, los restantes 28 dientes están estructurados para comer vegetales, igual que los dientes de otros animales vegetarianos por Naturaleza". 

                   Se supone que esto querrá decir que el organismo humano está diseñado para comer carne en una proporción como... de una octava parte de todo lo que ingiere. Parece bastante lógico. La información está en la base del desarrollo humano, lo que comparto son años de investigación y experimentación directa en campo nutricional y culinario.

                    Igual que en todas las “cosas”, los resultados buenos se consiguen con perseverancia, investigación, creatividad, pasión etc.… Yo soy de los que sostienen que las personas que aprecian los sabores veraces de los alimentos son las más afortunadas, porque disfrutan más fácilmente de comer “natural” que otras más exigentes, en cuanto a tener paladares sofisticados, quizás demasiado….

                     En todo caso el hecho de tener cierta critica, exigencia y atrevimiento, también conlleva el poder de lograr buenos resultados….. Te animo a cuestionar y a experimentar.

                      Algo que he comprobado, por lo menos a nivel personal, es que cuando preparo algo con ilusión, sabiendo lo que quiero hacer exactamente y haciendo-lo, el resultado suele ser como mínimo exhaustivo.

                      Aquí un referente simple para saber hasta que punto lo que te gusta comer es de “buena calidad” desde la mira de lo natural, de lo sano:
Si guardas el exquisito guiso que te han regalado o que has preparado en un contenedor, sobre todo si es de plástico, o en el mismo plato, y te das cuenta que al lavarlo está muy pringado de grasa, que lo has de enjabonar más de una vez, puede ser exquisito sí, pero muy sano te aseguro que no es…. no se si me explico.

lunes, 20 de abril de 2020

Masticación- Digestión


               Estas dos funciones que nuestro organismo cumple prácticamente a diario, debido a que por lo general nuestra vida en este plan depende también de los alimentos, como bien sabemos, se desarrollan en base a un principio voluntario que es la masticación, o sea dictado por nuestra acción-elección consciente de comer, y otro involuntario, la digestión, gestionado por la inteligencia de nuestro organismo. La digestión es una compleja, maravillosa función que nuestro organismo sabe realizar independiente de nuestra voluntad, cada vez que comemos algo. Pero depende de la primera… si no comemos (acción que implica masticar aquello que llevamos hasta nuestra boca) la digestión no puede activarse, claramente.

               Por lo tanto se puede observar como tras movilizar nuestra voluntad-necesidad, en este caso la acción de comer un alimento, tal cual como podría ser una naranja o algo más elaborado, como podría ser un cocido de alubias con cebolla y perejil, después de llevar un alimento hasta la boca, con la MASTICACIÓN activamos esta segunda función involuntaria que nos brinda disfrute, vida y salud: la DIGESTIÓN.

               En nuestra boca gustamos, saboreamos, nuestro organismo identifica, pre digiere cada bocado que comemos ensalivando lo, mientras lo vamos simplificando, reduciendo y desmenuzando a través de la masticación. A medida y dependiendo de como masticamos, depende este proceso vital involuntario llamado DIGESTIÓN, un sistema vital de nuestro organismo; nuestra salud depende casi totalmente de dicho proceso, que consiste en reducir, procesar, asimilar todo lo que ingiere, a partir de lo que recibe a través de la boca, y en expulsar lo que no necesita y que es indigerible. Tras digerir, nuestras células realizan el metabolismo de lo que hemos ingerido.

                En función de la consistencia de los alimentos que comemos, depende nuestra masticación. Todos sabemos que una buena masticación es básica para que nuestro organismo digiera y asimile nutrientes a partir de nuestra alimentación, de lo que comemos. Cada bocado tiene que ser masticado hasta que nuestros dientes lo hayan desintegrado completamente, hasta que esté completamente ensalivado, pues si nos tomamos este cuidado en cada comida nos aseguramos y adjudicamos muchas ventajas, entre ellas:

- Digestión del alimento más ligera, rápida y fácil.

- Asimilación completa de los nutrientes.

- Facilitamos el transito intestinal del bolo alimenticio que, a lo largo de su trayecto, va cediendo a la flora intestinal sus propiedades, gracias a tialina, jugos gástricos, jugos pancreáticos y biliares, con todas sus componentes.

- Favorecemos la eliminación de los restos del bolo alimenticio como fibras, celulosa y cenizas, que transitan de esta manera con más rapidez todo el trayecto intestinal, hasta su natural expulsión.

- Con una masticación consciente, prolongada durante el tiempo suficiente, hasta sentir en la boca que el bocado tiene una consistencia entre sólido y liquida homogénea, favorecemos la absorción de todos los nutrientes de los alimentos que comemos; incluso comeremos menos cantidades de alimentos, por extraer de ellos todos sus nutrientes, las sustancias que necesitamos y su metabolismo.

               Cuanto más consigamos triturar los alimentos con nuestra dentadura, más sencillo y fácil serán, para nuestra flora intestinal, las tareas de descomponer, reducir, asimilar, absorber, etc. todos los nutrientes de lo que comemos.

               Son especialmente las personas con digestiones lentas y pesadas aquellas que deberían prestar más atención en masticar muy bien. El fuego gástrico, nuestro procesador digestivo, muy a menudo ha perdido vigor debido a diferentes factores básicos que pueden resumirse en:

- Una alimentación inadecuada, es decir comer en exceso (puede ser también en defecto, aunque en nuestra época y en occidente eso es poco frecuente).

- Masticación insuficiente, con la consecuente ingesta de un bolo alimenticio poco ensalivado y no bien desintegrado, no suficientemente triturado por la dentadura.

- Combinar variedades de alimentos diferentes en una misma comida (es recomendable no mezclar más de dos platos en cada comida para tener buenas digestiones).

- Combinar categorías de alimentos incompatibles entre ellas en una misma comida.

- Desconocer la compatibilidad entre alimentos con respecto a una correcta digestión y asimilación de los nutrientes.

- Comer según nuestros antojos y no cuando hay necesidad, o sea cuando aparece el estimulo del apetito, que es una necesidad natural del organismo animal.

- Beber líquidos justo antes de las comidas; nunca deberíamos beber líquidos almeno una hora antes de comer.

viernes, 1 de noviembre de 2019


El otoño y la primavera son estaciones ideales
 
 para “ayunar, o sea para depurar el organismo
 
 a través de descansos digestivos y físicos


Los requisitos esenciales para ayunar son:
 
No trabajar, protegerse del frio, evitar ver televisión, escuchar radio, evitar discutir, olvidar las preocupaciones, evitar tener contactos (aunque sean telefónicos), evitar las tertulias, olvidarse del trabajo, así como de temas económicos, papeleos, de asuntos burocráticos etc…


Abstenerse totalmente de practicar sexo, de tomar alcohol, excitantes, tabaco, cualquier droga o sustancia que altere el sistema nervioso y la mente, evitar incluso las especias.
Lo ideal es desconectar del mundo exterior, relajarse totalmente (al ser posible), reposar, meditar; es importante evitar pasar frío en todo momento; en las horas más templadas pueden darse paseos cortos y suaves, bien abrigados, pero ligeros, sin esforzarse ni sudar;

Lo ideal, tanto para emprender como para finalizar un ayuno, es practicar una dieta depurativa a base de productos ecológicos de temporada, integrales, siguiendo este orden: en primer lugar hay que suprimir de las comidas carne, embutidos, pescado, queso, huevos, azúcar y repostería que lo contenga, todo alimento pre-cocinado, congelado o enlatado, durante por ejemplo dos días, pues seguir eliminando de la dieta legumbres, pan, reducir a lo mínimo el consumo de aceite, que en todo caso será solo en crudo (es decir nada de frituras, guisos etc.), por ejemplo comiendo solo a base de cereales integrales ecológicos, hortalizas, frutas y verduras crudas o cocidas al vapor y caldo depurativo durante otros dos días; a continuación suprimir también los cereales y seguir una dieta con solo frutas y verduras (crudas mejor, o hervidas al vapor pero sin añadir aceite) durante dos días mas, y continuar ingiriendo solo líquidos, zumos exprimidos y licuados frescos (para ello es imprescindible disponer de una licuadora).


Llegados a este punto tenemos dos opciones:


1) seguir el ayuno ingiriendo nada más que agua; llegados a este punto si decidimos tomar solo agua durante un día, por ejemplo, tras este día de “ayuno total” ingiriendo solo agua, invertimos el proceso anteriormente explicado, tal cual hemos hecho en el viaje de ida, para así decirlo (así como explico también en la opción 2 a continuación); o sea, tras haber tomado solo agua durante un día, por ejemplo, volveremos a introducir zumos de frutas y verduras frescos, luego vegetales crudos o hervidos al vapor, caldo depurativo, algo de cereal integral... y paso seguido podemos introducir la proteína vegetal de las legumbres, el miso, algo de pan etc., finalmente para los que no son veganos se vuelve a introducir en la dieta la proteína animal. A partir de este punto, es decir desde que volvemos a introducir las proteínas, se considera que el ayuno haya finalizado.


2) invertir la dieta depurativa que hemos practicado desde el comienzo para salir del ayuno sin llegar a tomar solo agua; es decir, si llevamos dos días tomando solamente zumos y licuados, volveremos a introducir frutas, verduras y caldo depurativo durante el mismo tiempo, luego ya introduciremos algo de cereal integral para acompañar las verduras durante el mismo tiempo, luego podemos introducir algo de miso, legumbres (proteína vegetal), y por último, tras haber invertido el proceso introduciendo paulatinamente todos los nutrientes igual que hemos hecho en el trayecto de ida, para entendernos, volveremos a introducir lo que solemos comer normalmente.

jueves, 4 de julio de 2019


Los beneficios del ayuno son realmente terapéuticos

Tras practicar un ayuno, aún de solamente un día tomando agua, los beneficios son tangibles. Claramente un ayuno de un solo día puede proporcionar mejoras limitadas a lo que cada organismo sea capaz y pueda ejecutar, eso depende del estado de salud de la persona, que a su vez puede depender de muchos factores…, pero principalmente de la acumulación de toxinas que el organismo tiene almacenadas; por lo tanto cuanto antes una persona emprenda, familiarice y se acostumbre a practicar “descansos digestivos”, favorecerá la eliminación de toxinas por parte de su organismo, pues gozará de más vitalidad, energía, longevidad y salud.

Ahora bien, una cosa tengo que dejar claro: si una persona toma medicamentos alopáticos para tratar cualquier tipo de patología, yo no lo recomiendo, ni lo sugiero…. Ya que de ser así, en todo caso tendría que suspender el tratamiento durante el ayuno, y esto podría suponer hasta graves consecuencias, dependiendo de la patología.

En caso de tomar medicamentos, tanto alopáticos como naturales, u homeopáticos, es en todo caso imprescindible que la persona consulte el médico con quien está en tratamiento, “antes” de emprender cualquier ayuno.

En caso de tomar medicamentos alopáticos el ayuno no es aconsejable por varias razones, entre ellas y sobre todo porque ayunar significa entregarse al poder sanador del “organismo”, en cuanto a “sistema biológico autónomo” capaz de auto regenerarse, de auto sanar por sí sólo… Si una persona padece de una enfermedad y está con un tratamiento, quiere decir que su sistema inmunitario no ha podido hacer frente al problema por sí solo. Esto es algo que puede pasar a toda persona, incluso a personas que normalmente cuidan de su alimentación.

Desde la mira de la Naturopatía, por lo general, tratamos de ayudar al organismo con remedios naturales que ayuden el sistema inmunitario a reaccionar, a superar el problema.

La acumulación de toxinas en el organismo es una causa primaria del deterioro de su estado de “salud”, porque este factor influye también en el sistema inmunitario, debilitándole. Por esta razón quiero destacar que el ayuno es algo que todos tendríamos que practicar periódicamente, aprovechar para descansar, preservar nuestra propia salud fortaleciendo el sistema inmunitario, y por tanto como medida preventiva hacia cualquier malestar o enfermedad.

Cuando una persona deposita toda su confianza en un remedio externo, del cual va a depender su eventual sanación, lo ideal sería que supiera la diferencia entre un tratamiento natural, enfocado a que su sistema inmunitario reaccione para que su organismo supere el problema, y un tratamiento alopático que actúa en contra del síntoma, pero sin resolver la causa del problema; es un tema que hay que meditar en profundidad, o sea reflexionar sobre ello poco a poco, para entenderlo de verdad.

Es normal y pertinente que cuando aparecen síntomas anormales, dolencias, trastornos, malestar etc., nos dirijamos a nuestro medico para saber qué nos está pasando. Pero hay que diferenciar entre tomar consciencia del propio estado de salud implicándose con uno mismo, y el delegar la propia responsabilidad a otros (en este caso el Médico) sin hacerse cargo del propio problema. El meollo de la cuestión es que si una persona padece de algo, no puede pensar que alguien tenga que arreglárselo, porque el problema es suyo, se ha originado por alguna razón de la que únicamente ella es realmente la responsable.

Ahora bien, la “medicina tradicional occidental moderna”, en lugar de ocuparse de ir a las raíces, o sea de identificar las causas reales de los problemas de salud, trata directamente el síntoma con medicinas que tienen siempre alguna contra-indicación, ya que están fabricadas para eso, no son tratamientos que resuelven los problemas saneándolos, sino aliviando o suprimiendo el síntoma. De no ser así, la sanidad pública tendría que desarrollar infraestructuras enormes y, tal como está el estado de salud general de la humanidad hoy día, necesitaría ejércitos de médicos y personal sanitario. La responsabilidad de cuidar de la salud propia, en definitiva, es algo que le corresponde a cada individuo.

Así como está estructurada nuestra sociedad, en la que impera la economía, nadie tiene tiempo, y por lo tanto ni puede cuidarse. Desde el sistema educativo de nuestras escuelas tampoco se prioriza la enseñanza del cuidado personal a través de una cultura higienista, de una alimentación saludable, de cómo cultivar valores elevados y altruistas en uno mismo, valores espirituales universales en lugar que religiosos. Todas las causas de nuestras enfermedades y problemas son el resultado de un sistema global muy mediocre donde imperan los intereses, donde no hay verdadero amor.

La Sanidad pública no podría ser distinta de lo que es actualmente mientras no cambie dicho sistema que lo engloba absolutamente todo, porque la mayoría de las personas enferman por la su propio estilo de vida antinatural, insostenible, y por lo menos a través de diagnósticos, tratamientos alopáticos y cirugía, consigue mantener vivas a muchísimas personas que normalmente fallecerían, o que en todo caso sufrirían muchísimo antes de... 

Pero este no es el camino para sanar de verdad. La homeopatía, por ejemplo, sí está concebida para resolver la patología desde su origen, o sea tratando la raíz, la causa del problema. El objetivo es sanar, extirpar el problema; si tengo una infección dental por ejemplo, es porque tengo algún diente con caries o roto que se ha infectado, y por esto necesito tomar antibióticos. Si hubiera acudido al dentista antes de que el diente se infectara, tras advertir los primeros síntomas, quizás el dentista hubiera podido curar, salvar la pieza. Pero en dicho caso la solución es extirpar la pieza que se ha infectado. El antibiótico es un paliativo provisional, como bien sabemos.

Un organismo sano tiene su sistema inmunitario eficiente capaz de hacer frente a cualquier problema. Cuando hay una patología, dicho requisito ya es de por sí precario, deficiente u ausente, porque la patología o trastorno del que la persona padece tiene que ser tratado con medicamentos, naturales o químicos. Esto es algo normal que a toda persona le pasa. El caso es que la gran mayoría de personas, que básicamente no confían en sí mismas, es decir en la inteligencia creativa y sanadora de nuestra naturaleza, no son conscientes de esto, y por esta razón eligen la solución más fácil, eligen “lo barato”, para entendernos…. ¡Pero lo barato muy a menudo sale caro!

Cada vez más personas están despertando de la triste realidad de nuestro mundo, que todos nosotros hemos creado y hemos permitido que llegase a ser, hasta hoy día, tal y como es. Todos sufrimos alguna forma de enfermedad o patología, a nivel físico, emocional y/o mental.

En dicho caso, el “camino alternativo” posible, está siempre vinculado a la decisión y al criterio del profesional que está tratando al paciente que quiera emprender un camino de curación integral. Claramente y venturosamente hay diferentes ramas de Medicina Holísticas, que ofrecen alternativas a la tradicional, adictiva y muy limitada medicina alopática, esa de “me duele un dedo, me tomo un anti-dolorifico…”, que lamentablemente es la que tiene más seguidores-consumidores.

La humanidad está muy perdida por lo general, pero quiero seguir apostando por el “despertar”, de lo contrario ni compartiría eso que está leyendo. La Naturaleza es sabia; nuestra Naturaleza es Divina, ilimitada, totalmente poderosa. Pero hay que creerlo. Y para creerlo hay que experimentarlo, o sea empezar a confiar.

Gracias a la Medicina podemos tener los diagnósticos, para tomar consciencia de nuestro estado de salud real. La Naturaleza tiene toda clase de remedios, y por eso hay muchos profesionales de Medicina Alternativa capaces de restablecer el estado de salud de sus pacientes, siempre que esos últimos confíen en dichos profesionales, a través de tratamientos naturales que apuntan a sanar las verdaderas causas, el desarreglo orgánico, emocional o mental  de cualquier patología.

Pues el Ayuno es el método Universal de Prevención y Auto Sanación al alcance de todos. No obstante es recomendable documentarse bien sobre el tema antes, a través de alguien experto, especializado en el ayuno, y para quienes decidan emprenderlo, cuidar especialmente una dieta previa adecuada, así como cuidar la interrupción del ayuno introduciendo en el organismo vegetales ecológicos crudos, primeramente solo líquidos, luego sólidos, antes de volver a introducir cereales integrales, y por último introducir alimentos fuente de proteínas.

En definitiva, gozar de un buen estado de salud depende en gran parte de la calidad de nuestra alimentación; una dieta alcalina equilibrada, o sea basada en alimentos de origen vegetal integrales de temporada, al ser posible de cultivo ecológico, bien combinados en cada comida, que incluya alimentos crudos cada día, es el primer paso para asegurarnos una vida saludable.

miércoles, 10 de abril de 2019


El principal problema para llevar una alimentación saludable, hoy día, para la mayoría de personas y familias, consiste en que en las últimas décadas hemos modificado nuestros hábitos siguiendo las sugerencias estridentes de los medios de comunicación, televisión, informativos, de la publicidad. Nos han persuadido a introducir en nuestro organismo alimentos cada vez menos naturales y refinados… 

Lamentablemente una vez acostumbrados a los sabores sofisticados de productos listos para el consumo, que no requieren nada más que ser calentados al microondas, o de ser consumidos directamente tras abrir el envoltorio, se adquieren dichos hábitos, nos acostumbramos a ellos, y desaprendemos toda una serie de costumbres culinarias enfocadas a consumir alimentos de temporada, más bien de proximidad en lugar que exóticos, relacionadas con el entorno en el que vivimos, que están directamente relacionadas con el apetito, que es un estimulo natural del organismo animal-humano.

Por esta razón se van omitiendo y perdiendo también ciertas buenas prácticas que hemos aprendido o heredado  para procesar los alimentos con el fin de que no pierdan sus propiedades, o enfocadas incluso a potenciar sus virtudes, como es el caso de germinados, ciertos productos fermentados, deshidratados, etc. 

Cuanto más procesos a nivel industrial tengan los alimentos que ingerimos, tanto más despistamos y disipamos la misma inteligencia de nuestros organismos, que ya no son capaces de reconocer dichos “alimentos”; también nos alejamos del correcto y saludable apetito… y en cambio lo sustituimos con toda una serie de antojos, engendrados también por ciertos aditivos y conservantes, que para nuestra salud son considerablemente dañinos, por lo que la gran mayoría de estas prácticas saludables, de preparar nuestros alimentos con consciencia, van desaprendiendo, son descartadas, ya no encontramos tiempo para dedicarlo a la cocina de cada día. Eso es debido también al hecho de que muchos vivimos alejados de la tierra, en aglomerados urbanos, por depender cada vez más de las grandes superficies para hacer nuestras provisiones..

También por estas razones nos alejamos progresivamente  de los avances que se lograron a lo largo de las últimas décadas, de los últimos siglos, de culturas logradas a través de generaciones, y en lugar de evolucionar hacia una alimentación más saludable, gracias a la gran disponibilidad de alimentos de la que disponemos hoy día, en muchos casos buscamos suplementos dieteticos.

En el punto crítico donde nos encontramos, para volver a valorar los sabores auténticos de los productos naturales y disfrutar de ellos, personalmente conozco una sola manera…. Consiste en hacer dietas depurativas durante varios días, periódicamente (consultad en “Recetas” la de <<Caldo Depurativo>>, esa receta, muy efectiva y relativamente fácil, podría ser interesante hasta para personas reticentes), básicamente a base de frutas y hortalizas crudas de temporada, cultivadas de manera natural, es decir ecológicas. No estaría de más incluso ayunar un fin de semana cada temporada, o dos veces cada año, preferentemente en primavera y en otoño, para que además de depurar maravillosamente nuestro organismo, nuestras papilas gustativas vuelvan a recobrar su sensibilidad natural, y siguiendo las correctas indicaciones que muchos ya han experimentado, pueda lograrse inclusive cierta paz y salud mental…

Vivimos en un mundo muy contaminado, donde hasta comiendo sanamente, es decir alimentándonos a base de productos vegetales de temporada y ecológicos, así como manteniendo cierta paz interior, (eso es otro punto clave, ya que realmente si el ser humano no es capaz de mantener su paz interior, eso también genera muchas “toxinas”) es imprescindible ayudar nuestro organismo a eliminar esas toxinas, a depurar la sangre, a depurar el agua del sistema linfático y de nuestras células, ya que nuestro cuerpo está constituido básicamente por el agua. Las dietas depurativas a base de caldo depurativo, vegetales de temporada crudos, y el ayuno (para ayunar es imprescindible absoluto reposo) tomando solamente agua, son el medio más directo y eficaz para descansar, depurar el organismo, rejuvenecer, fortalecer el sistema inmunitario, adquirir paz interior y salud.

domingo, 22 de enero de 2017

El abc de la Cocina Sana

Unas pocas palabras sobre el recorrido de mí nutrición: desde los años 80 he empezado a interesarme y a practicar una alimentación más sana; diciendo más sana me refiero principalmente a una alimentación de calidad superior a la que practica la gran mayoría de las personas; es decir más completa, seguramente más saludable, y (para quien no ha perdido la sensibilidad/veracidad del paladar) de más disfrute debido al gusto autentico de alimentos y productos de la Tierra en su estado Natural, realmente exquisito.

Mis agradecimiento a mis padre, mis primeros auténticos instructores en este campo. De hechos en mi familia de origen la importancia de comer sano ha sido desde siempre algo prioritario. Mi padre era quien se ocupaba de las compras, sabía elegir bien la calidad de los alimentos, y mi madre era la que sabía cocinar, ponía realmente amor en lo que preparaba cada día. Ambos nacieron en familias que vivían en el medio rural; desde que yo recuerdo nuestra dieta incluía una amplia variedad de alimentos de origen vegetal de temporada, que mi madre sabía elaborar de manera muy natural y a la vez sabrosa.

Con 21 años nació mi interés hacía una alimentación básicamente vegetariana, gracias a que conocí personas eruditas en este campo que me ayudaron a comprender su importancia. La decisión de renunciar a comer carne animal la tomé con 23 años. Paulatinamente surgió mi interés hacia la cocina natural, luego hacia la salud integral a través de la alimentación, hasta que decidí profundizar y dedicarme a ello.

Los alimentos de los que se compone mi dieta, básicamente vegetariana, son ecológicos, frescos y de temporada, por lo que se refiere a frutas, hortalizas y plantas silvestres, además de cereales y sus derivados como copos, pan y pasta integrales, legumbres, semillas y frutos secos. Empleo aceites vírgenes posiblemente prensados en frío, mantequilla clarificada, algas marinas, derivados de la soja como miso y tamari (puntualmente tofu y tempeh), sucedáneos vegetales de la leche, miel de las abejas, quesos frescos artesanales, puntualmente semi curados, curados y yogures artesanales, muy puntualmente productos exóticos, algún huevo, y en ocasiones extra ordinarias algo de pescado (esto último puede ocurrir 3-4 veces en un año). 


El abc de una Alimentación Saludable, Natural
Premisa                                           

Con este cifrado abc, he pensado reunir los principios básicos que resumen mi visión de los requisitos imprescindibles para nuestra alimentación, para que sea nuestra propia fuente infalible de vitalidad, energía y un buen estado de salud general, para hacer de esos requisitos una realidad duradera desde el ahora, en nuestra vida.


Resumo estos requisitos generales para cualquier persona, que sin entrar en el campo de las patologías (es decir no enfocados a ser un tratamiento directo hacía cualquier patología diagnosticada o probable), suponen un vademécum completo y operable que aporte resultados tangibles, reales, a cualquier ser humano con ánimo y buena voluntad, en cuestión de semanas.. o meses.



Para ello es imprescindible que la persona interesada profundice sobre su estado de salud y personalice su dieta teniendo en cuenta los puntos expuestos más adelante, por lo que está claramente dirigido a toda persona que haya decidido encaminarse hacia la recuperación de un mejor estado de salud, animada, y sobre todo que crea posible fortalecer naturalmente su longevidad mejorando su alimentación, eliminando o reduciendo considerablemente el consumo de carne animal para empezar, y que quiera vivir una vida plena con todos los atributos benéficos deseables, buena vitalidad, vigor, entusiasmo, dispuesta a implicarse consigo misma. 

Quiero decir con esto que el requisito principal, en todo caso, es comprender que nuestra alimentación afecta directamente a nuestra salud… es confiar en uno mismo y en la inteligencia del propio organismo, es decir creer que introduciendo estas nuevas pautas saludables en nuestra manera de comer va a tener efectos benéficos a corto, medio y largo plazo, o sea nos proporcionará una mejora general del estado de  salud, siempre que seamos coherentes con nosotros mismos.
Para ello es recomendable, en la mayoría de los casos, la ayuda y una orientación específica de algún dietista naturista, naturopata, o persona experta en nutrición orto molecular.

Abc de una alimentación saludable

a)
·        Conocer las bases para practicar una cocina equilibrada, rica y natural, que se explican a lo largo del presente blog.
·        Reconocer los alimentos más saludables disponibles en el mercado en relación calidad/precio/temporada.
·        Aprender técnicas de conservación y almacenamiento de los alimentos en general, con el fin de consumir alimentos vivos, íntegros y de temporada
b)
·         Técnicas naturales de elaboración y cocción de los alimentos, para aprovechar al máximo todas sus propiedades naturales. Cocinar con consciencia.
·    Conocer los nutrientes básicos, sus propiedades, en que proporciones se necesitan, los alimentos en los que vamos a encontrarlos...
·        Aprender a combinar los alimentos correctamente para una fácil digestión, buena asimilación, pues para tener energía y vitalidad.
·            Consejos prácticos sobre el uso y la calidad de los utensilios de cocina.
·            El correcto uso del fuego en la cocción de los distintos alimentos.
·           Organizar los  menús semanalmente y según la temporada.
c)
  • ·                                    Nuestra actitud a la hora de comer.
  • ·                                   Nuestra actitud frente a la vida en general.

sábado, 14 de enero de 2017

Si quieres vivir y ser saludable recuerda…

Elegir alimentos de calidad, y con calidad me refiero a:
-     - Frescos, que sean vivos.. (si miramos una lechuga, una zanahoria o una fruta, en seguida vemos su estado de salud, si tiene vitalidad, observando su consistencia, su aspecto, su color).
-          -  Que procedan de cultivos ecológicos.
-         -  Que sean integrales y no refinados o pre cocinados, es decir en su estado original. Hay que incluir frutas y hortalizas de temporada en cada comida (es recomendable que haya por lo menos un plato de vegetales crudos al día en nuestra dieta).
-           - Reducir  el consumo de carnes y pescado a no más de dos veces por semana.
-         - Eliminar totalmente el azúcar blanco y las sacarinas, personalmente no estoy a favor ni de las fructosas, puesto que una vez se desintegren los frutos de la tierra para extraer de ellos algunos de sus componentes, ya no es lo mismo…, para endulzar es recomendable también la estévia en hojas, si se muele se la puede añadir directamente a batidos y en la repostería, además de endulzar tiene propiedades curativas para que el organismos vuelva a recuperar su función correcta en sintetizar y asimilar los azucares presentes en las frutas, ciertas hortalizas y alimentos fuentes de azucares complejos como es el caso de los cereales integrales.., 
     la miel virgen –no la industrial- procedente de apicultores que no explotan a sus abejas, es una de las mejores alternativas naturales al azúcar (un kilo de miel sólo contiene de 1 a 4 gramos de sacarosa), el sirope de cebada, trigo y arroz son mieles vegetales excelentes para endulzar, o bien el azúcar integral ecológico certificado como la panela del comercio justo.
-          - La sal de mesa refinada, la yodada y las que contienen el E 535 (el anti aglomerante que le añaden para que no retenga humedad, que es su propiedad natural) son dañinas, la mejor sal es la no refinada secada al sol, o la sal rosa procedente de minas, como la del Himalaya.

-         - Elegir alimentos de calidad quiere decir tener claro y haber entendido que la industria alimentaria y los mercados convencionales no apuestan para la salud, solo apuestan para sus beneficios económicos, y esto es un requisito inversamente proporcional  a que los productos sean saludables, en la gran mayoría de los casos…

lunes, 2 de enero de 2017

Más detalles sobre la "calidad" en la alimentación

Hago una puntuación sobre la definición “alimentos de buena calidad”:
Desde mi punto de vista, basado en la experimentación e investigación que he realizado sobre mí mismo y otras personas cercanas, dicho término tiene que hacer referencia a las virtudes nutritivas y saludables de los alimentos.

El término “de buena calidad” se refiere básicamente a que los alimentos no sean procedentes de cultivos OGM, es decir tienen que proceder de cultivos ecológicos donde no se empleen productos químicos como herbicidas, para combatir plagas, parásitos etc., ni tampoco fertilizantes y abonos sintetizados a nivel industrial; lo ideal es que todo proceda de nuestra Madre, la Tierra, sin manipulaciones humanas sofisticadas y explotadoras. 
Con esto hago referencia en primer lugar a las manipulaciones genéticas que se realizan sobre las semillas, por sus consecuencias que afectan al medio ambiente, la salud animal y humana, y en segundo lugar a la mayoría de las preparaciones y transformaciones de la industria alimentaria previas a la venta de los productos aptos para el consumo humano y animal en general (incluyendo los piensos industriales que comen los animales que producen leche, huevos, miel etc. distribuidos por el mercado alimentario convencional). 

miércoles, 12 de septiembre de 2012



Toda persona dispuesta a renovarse, puede conseguir mejorar considerablemente su calidad de vida en cuestión de semanas.
Hasta el momento he publicado en este blog toda una serie de pautas que es necesario entender y poner en práctica, con respeto a la alimentación de cada día, puesto que de este asunto estamos tratando en el mismo blog.

Nuestro organismo es un micro-cosmos, dotado de una inteligencia propia, en su condición normal trabaja día y noche sin quejarse, para realizar todas sus tareas, todas las necesarias, para asegurar su mantenimiento y un estado de salud perfecto. 


Esta inteligencia, si somos conscientes de ello, es capaz de hacer frente a cualquier problema o anomalía que pueda ocasionarse, e incluso, si todavía no somos conscientes de su perfección, trabaja constantemente para hacer frente a toda "barbaridad" que, lamentablemente, la gran mayoría de las personas causan a su organismo prácticamente a diario, principalmente debido a lo que ingieren, así como a los hábitos adquiridos.


Hago un ejemplo sencillo: tomar una caña de cerveza sistemáticamente, justo antes de las comidas, es una pequeña barbaridad... si son dos ya es una mediana barbaridad, y si son más de dos es una barbaridad en toda regla. ¿Por qué? Porque los jugos gástricos se diluyen, y eso dificulta inexorablemente la digestión... sin hablar de su contenido alcohólico.


Diciendo "toda persona dispuesta a renovarse" me refiero a un requisito en concreto, y el requisito del que hablo es la "receptividad". Es el primer paso, si queremos renovarnos, que tenemos que tener en cuenta. Pues tenemos que amar a nuestro organismo, tenemos que amarnos.... después de comer podemos tomarnos unas cañas, si queremos, pero después y no antes, a no ser que sea... ¡de vez en cuando!



jueves, 2 de agosto de 2012

"Consideremos el beneficio que aporta en nuestra vida el comer sano; desde el disfrute de comidas excelentes cada día, la creatividad que despertamos en nosotros preparando nuestros platos con gusto y técnicas sanas, , y el estado de salud que ganamos hasta en nuestros sueños, digiriendo y asimilando los alimentos estupendamente, es fácil imaginar que nos ahorraríamos seguramente mucho tiempo, entre  colas en ambulatorios, farmacias, despachos de médicos.. (con sus relativos costes económicos)... etc. ¿Entonces para que seguir estando regular o fatal, en el peor de los casos? Investigar, expandir horizontes, experimentar... Por lo general creo que no hay que temer a los cambios...Es mejor lo bueno por conocer, que lo malo conocido...
¡Mucho Mejor!".

lunes, 30 de julio de 2012



     ¿Sabes como, cuanto y que comer para "vivir" con energía y en plena salud?

A lo largo de 25 años de experimentación continuada en cocina natural, hemos formulado respuestas satisfactorias que han persuadido hasta personas obstinadas en introducir mejoras en sus hábitos alimentarios, sobre todo tras probar los sabores auténticos de las recetas naturales, elaborados con alimentos vivos y creatividad en directo. 

Tiempo y dinero, la lucha de cada día...¿Las "comidas rápidas" han triunfado?....¿Por que será? Aparentemente, en términos de rentabilidad, sus ofertas son seductoras; pero....a cuentas hechas y valorando la calidad de lo que ofrecen...¡su éxito no está siendo tan barato, mirándolo bien! ¿Tendrá esto algo que ver con el déficit de la seguridad social?...
Sin duda y venturosamente seguimos teniendo opciones de comer mucho mejores; Esta es una alternativa autentica para aprender a invertir de la mejor manera dinero y Tiempo, ahorrando de verdad a corto y largo plazo...Valorando la calidad a expensas de la cantidad, para empezar;
¡Poder gozar de buena salud y tener vitalidad está, ante todo, en nuestras manos!

viernes, 13 de julio de 2012


¿Cómo influye lo que comemos sobre nuestro estado físico, el campo mental y emocional? ¿Y cómo influyen pensamientos y emociones sobre nuestra alimentación, digestión y asimilación de los alimentos?

Somos lo que comemos y cómo comemos, pero también lo que pensamos, y por supuesto somos también nuestras creencias, sentimientos y emociones. 
Tenemos la clave para que aprendas una autentica y práctica cocina saludable, con la que además de disfrutar de una interminable gama de exquisitos sabores, tengas buena digestión y fácil asimilación de los nutrientes;  El ciclo básico de formación que propongo, teórico y práctico, consiste en 3 módulos por un total de aproximadamente 30 horas. 

Aprendiendo las bases de una cocina más natural y practicando a diario, abrimos otro camino para conocernos más a fondo, desde el plano físico, al campo mental, emocional y energético. La misma naturaleza de los alimentos vivos de temporada que comemos, que alimentan nuestro cuerpo físico, nos dejan su experiencia de vida como herencia, por esto es importante tener consciencia de su ciclo vital, agradeciéndolos.  A través del equilibrio Yin-Yang de las distintas categorías de alimentos, de sus efectos inmediatos y pos digestivos, podemos encontrar más fácilmente un estado de salud estable, en todas las áreas de nuestra vida. 
Estamos viendo cada vez con más claridad que, para nuestra evolución como seres humanos, un cambio de paradigma es necesario; la alimentación es un factor determinante que, dependiendo de la importancia que tenga para cada individuo, influye en su realidad, influye directamente sobre todos esos campos que abarcan la Salud Integral. 

Toda persona sabe de la necesidad de tener buena salud, a todos los niveles (sin ella la vida es muy triste y todo se hace cuesta arriba), pero muy pocas personas son conscientes de eso, y de que si no cuidamos de nuestra Madre Tierra... no hay ningún futuro posible para nadie....

Pues consumiendo alimentos ecológicos, a granel, frescos, de producción local y mejor calidad (no transgénicos, obtenidos sin agro-químicos etc...), no desperdiciando (es imprescindible reducir a lo mínimo el derroche de transportes, recursos y embalajes, de materias primas, de sustancias contaminantes y productos de desecho que genera la explotación agro alimentaria mundial), aportamos nuestro granito de arena a favor de un mundo más limpio, sin explotación, de un comercio más justo, de una economía realmente enfocada al "bien común"..., para eso es imprescindible potenciar la economía y el mercado local, de proximidad. 

Por todas estas razones, elegir comer mejor, además de beneficiarnos directamente, es una decisión inteligente,  económicamente sostenible y supuesta mente acertada, en éste momento de renovación a nivel global.

Esta propuesta ha sido elaborada a partir de los antiguos conocimientos y sabidurías humana en materia, enriquecida por los avances en nutrición y dietética actuales, validada por más de 20 años de experimentación directa. 

lunes, 18 de junio de 2012

Pasos claves para tener "Salud en Tus Platos":


Los pasos a dar se pueden resumir en dos conceptos básicos, independientes y relacionados a la vez entre ellos...

El primero: consiste en experimentar, directamente y a través de la practica diaria, un vademécum personalizado de alimentación sana y natural; esto implica adquirir información con respeto a :
  • Priorizar la calidad en los alimentos, mas que la cantidad; en otras palabras investigar el mercado de los alimentos a nuestro alcance, las cadenas de producción que hay detrás de ellos, encontrando las mejores opciones para elegir alimentos de buena calidad a precios asequibles. Lo local y de temporada suele ser lo más conveniente si es de cultivos limpios, tanto por nuestra salud, para ahorrar, que para fomentar la posibilidad de un futuro sostenible para la Tierra. 
  • Aprender el aporte de nutrientes que se necesitan diariamente (bien sea para niños, adolescentes, adultos o personas mayores) y en que proporciones; los alimentos que nos lo pueden proporcionar; la compatibilidad entre las distintas clases de alimentos; como organizar y estructurar nuestras comidas principales y meriendas, para practicar una dieta completa, de nuestro agrado y buena asimilación.
  • Realizar cierta investigación sobre nuestro estado de salud y gusto personal, nuestra constitucion, identificar los alimentos que por nuestro propio bienestar físico y de salud tendríamos que preferir, eliminar o limitar en nuestra dieta, siguiendo las indicaciones de nuestro medico o de algún profesional en nutrición, para alimentarnos según nuestras necesidades reales.
  • Practicar la “cocina natural” en el día día; es decir introducir en nuestros hábitos culinarios los métodos más naturales de preparación, conservación, elaboración y cocción de los alimentos, con el fin de extraer el máximo provecho de ellos; 
Ventajas a destacar:
  1.  la mejora de nuestra calidad de vida a nivel físico, mental y emocional... es lo que se suele experimentar desde un principio; (esto implica seguramente creer en ello y ser coherentes).
  2. disfrutar el placer y las ventajas al preparar nuestras comidas equilibradas; (igual que en casa no se come por allí).
  3. descubrir nuestra propia creatividad basada en los conocimientos adquiridos y...  
  4. disfrutar los beneficios y el placer del paladar de estar comiendo sano....

El segundo: se trata de mantener una actitud de paz interior (por lo menos) cada vez que vamos a comer algo:

Aquí la cuestión es algo muy personal; depende de la relación que llevamos con nosotros mismos. En realidad es una simple elección, tal vez lo que no sea tan sencillo es luego llevarlo a la practica....en otras palabras mantenernos en un estado de serenidad, sosegados, cada vez que comemos.
"No hay otra y mejor manera, para mejorar nuestro metabolismo, que la de aparcar nuestras preocupaciones y tensiones por lo menos a la hora de sentarnos a comer o merendar".